Los aceites esenciales de diferentes plantas han sido usados para propósitos terapéuticos desde hace cientos de años. La Escuela Española es la más antigua de todas las Escuelas de Aromaterapia. En los siglos IX, X y XI , nace el arte de la perfumería y la cosmética en España, adonde se desplazaron sabios y estudiosos de toda Europa, entrando por el camino de Santiago, para aprender de los maestros alquimistas españoles. Éstos afirmaban que los aceites esenciales son el alma de las plantas, su parte más luminosa y energética. Según ellos la eficacia de los tratamientos aromaterapéuticos dependía de la pureza y calidad de los aceites esenciales. Siguiendo con esta antigua tradición, Adalan ofrece en sus aromas y aceites para baño, la máxima pureza y calidad, sinónimos de curación.

Gelatinas para masajes

Elaboradas con aceites esenciales, de gran absorción y efecto rápido. Están pensadas para que se puedan aplicar sobre la zona a tratar con una simple friega, de fácil autoaplicación . Dejan la zona hidratada. Al tratarse de composiciones naturales, se pueden mezclar. No manchan.

Aceites para baño y sauna

Los aceites esenciales penetran a través del olfato y la piel al ser potenciados por el vapor de agua, que facilita su absorción. Además de potenciar su efecto terapéutico, te ofrecen un momento para relajarte y disfrutar de un descanso.

Aromas

¿Cómo se utilizan?:

Como terapia: Se abre en la habitación por la noche para respirarlo mientras se duerme (por la mañana se aconseja taparlo para que así la duración sea de más de un año). El aceite que contiene evapora muy lentamente, al no contener disolventes ni alcohol. En las horas del sueño 6-8 diarias, el organismo toma de cada aroma lo que necesita.

Como ambientador: Para mantener el ambiente permanentemente limpio y agradable. Se deja abierto en cualquier espacio , en este caso la duración será de 6 a 8 meses, constantemente abierto.